“Antes de tener una idea propia sobre los entresijos del flamenco, recuerdo cómo iba buscando opiniones de artistas que admiraba y cómo disfrutaba al encontrar discursos contrapuestos.” (Rocio Márquez, Una seguiriya solemne, Diario El Pais)
Comprender. Antes de crear, saber y conocer. Saber apreciar el sabor de los discursos contrapuestos, las opiniones y los puntos de vista diferentes. La realidad, y el cante, es poliédrica. Tener la humildad de tratar de entenderla en la mayor parte de su múltiples vertientes.
«La seguiriya es un palo solemne y trágico… Fue el estilo que más tiempo tardé en cantar …Casi todos los días me preguntaba si quería cantártela, a lo que yo respondía que no con tantas ganas como miedo. Mientras tanto, escuchaba todas las versiones que iba encontrando, desde Agujetas a Mayte Martín, pasando por Tomás Pavón y Mairena.» (Rocio Márquez, Una seguiriya solemne, Diario El Pais)
De nuevo la comprensión profunda del problema, del dominio que nos interesa. Rocío escuchaba todas las versiones de la tradición. La tradición, el conocimiento previo, lo que ya se ha hecho.